domingo, 11 de noviembre de 2012

10/11/12 – Una secuencia curiosa –

Foto: Gloria Jiménez



6.30 a.m. arriba! Fuera Gloria que hoy es sábado y hay mucho por hacer L
1ª tarea del día dar comida y agua a las mascotas… agua no más, hasta las 10 no hay comercio abierto, les doy una barrita de cereal como para que engañen la pancita. Aprovecho que está fresco y desayuno leche con café… Para lavar está feo, la señora que viene los viernes no vino… la tarea me toca a mí, mientras espero a Angelita una cuasi jubilada -compañera y amigaza- de la facultad; ella se llevará un poco de lo que no me sirve a mí y ocupa lugar pero que otra gente sí le dará utilidad .

Me estoy desprendiendo de las cosas que fueron de mis viejos, en enero lo hice con lo del “mono” -mi papi-  ahora con lo que fuera de la “mumy”. 

Nunca me imaginé que dar lo que fue de los que ya no están y son caros a los sentimientos –por lo menos a los míos- fuera tan, pero tan difícil!! Hace 4 años que cerré puertas, para que los espacios parecieran más pequeños y pasar desapercibidas las ausencias. En el día a día procuraba estar fuera de casa todo el día, por eso digo que la facultad es mi otra casa y me largué por las rutas a viajar con la idea de conocer y hacer conocer a través de la fotografía, los lugares bellos que tenemos en este agraciado país y que poco se conoce y como todo tiene un límite, hasta la vida misma, hoy siento que mi mente y corazón están fortalecidos y recién ahora puedo desprenderme de esas cosas que sirvieron, de alguna manera, como “tenerlos” aun en sus cosas (ropas, máquina de coser, veladores, radios, etc.). Lo que más me pone contenta es que van a parar a gente que necesita; así las cosas de los viejos seguirán “con vida” sirviendo al prójimo, está bueno, me gusta.    
La tarea será larga porque mis viejos tenían la manía de guardar “por las dudas”… ay que viejos cachivacheros que fueron… una heladera comprada en el año 56´, fue cambiada hace 20 años aproximadamente y que hizo mi mumy? La convirtió en ¡¡¡¡alacena!!!! Las veces que fui a guardar la manteca en esa heladera ni imaginar… ¿¿y las visitas?? llegaban con el “bebedaje” bajo el brazo y lo querían poner en la heladera hasta la hora de comer jajajaj… “¡¿y esto qué es?!” decían, “la heladera caliente, la fría es la otra” les contestaba mi vieja mientras le hacía los rulos a las empanadas, en tanto  el viejo –encargado de la fritada- bajaba y meeaba la cabeza como diciendo “no puede ser”… mi viejo no era cachivachero, a él lo que no le servía lo regalaba o ponía en la calle y que se lo llevaran los carreros… a todo esto la heladera “caliente” se la llevó Crese este invierno.
La máquina de coser que debe haber tenido sus 50 años largos, fue a parar a las manos de la señora que me ayuda con las tareas de la casa. Sí me quedé con la “Singer” de por lo menos hace 85 años, a ésa la  heredé de mi abuela.

Empecé a las 10 hs. y saque para la calle 3 bolsas y otras 3 para que se lleven los que hacen caridad. Cajas, bolsas de papel y barras de tergopol a un jardín de infantes para manualidades. Encontré cosas que estaban perdidas, entre otras, el reloj que le regaló mi papá a mi mamá en su 1er aniversario de casados, ése ya tiene destino, mi oftalmólogo, él es coleccionista de relojes antiguos… escribo la palabra antiguo y me doy cuenta que soy portadora de un pequeño anticuario!! jajajajajj... y claro, cómo no va ser así si los viejos cumplieron sus las Bodas de Oro. Lo cierto es que terminé (es un decir, ya que aún me queda bastante que clasificar) a las 14 hs. dije basta, hasta acá llegué, me día un bañozonon y volveré otro día sin sol…                   

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